Si hay un alimento estrella de la dieta mediterránea es el aceite de oliva. Cultivado a gran escala en esta región, es un alimento que se utiliza casi como elemento principal y común a muchas de las dietas de la región.
Más allá de su sabor y las oportunidades a nivel gastronómico, de lo que queremos hablar hoy es de los beneficios del aceite de oliva para la salud, así como de sus propiedades nutricionales y medicinales.
Propiedades del aceite de oliva
El aceite de oliva es un producto con alto contenido en ácidos grasas naturales sanos y en vitaminas y minerales, como las vitaminas E, la vitamina antioxidante por excelencia que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y el envejecimiento celular prematuro y la vitamina K, extremadamente importante para la coagulación sanguínea.
Aunque es muy común ver listados de vitaminas del aceite de oliva que incluyen otras como la A o las del grupo B, aclaramos que no las incluye, como tampoco magnesio, otro nutriente que suele aparecer erróneamente asociado al aceite de oliva.
En cuanto a los minerales, contiene 1 mg de calcio por cada 100 gramos de alimento, y también zinc y en menor medida hierro.
5 beneficios del aceite de oliva para la salud
Vamos a ver cuáles son los 5 beneficios del aceite de oliva que debemos conocer, ya que este suele estar presente en la mayoría de los hogares y sus posibilidades son mucho más grandes que la de aliñar una ensalada, algo que por cierto es importante (y delicioso) también.
1. Para la cara
El aceite de oliva, siempre que sea virgen o virgen extra, aporta innumerables beneficios para el cutis. Su uso es para darle elasticidad a la piel, combatir la sequedad y tratar las manchas de la piel fruto del envejecimiento o de la excesiva exposición al sol.
La mejor manera de utilizar el aceite de oliva para la cara es aplicarlo en una mezcla del aceite con unas gotas de limón. Lo esparcimos con los dedos por la cara y dejamos absorber durante unos minutos. Se debe realizar esto una vez al día para obtener a medio plazo los efectos deseados.
2. Para la piel
El uso del aceite de oliva para la piel data de al menos la época del antiguo Egipto, ya que fueron ellos los que descubrieron, o al menos eso creemos, que se trata de uno de los más potentes hidratantes naturales.
Gracias a sus propiedades reconstituyentes y antioxidantes que nos aporta la vitamina E, el aceite de oliva nos ayuda a mantener la piel elástica y sana. También se puede utilizar para regenerar las pieles dañadas e incluso como cicatrizante, aunque para esto último tenemos un artículo con una lista de plantas cicatrizantes que siempre viene bien tener a mano.
3. Aceite de oliva para el cabello
El aceite de oliva aporta enormes beneficios para el cabello, tanto si lo tenemos quemado y queremos cuidarlo como si lo tenemos encrespado o rizado y queremos darle frescura. También beneficia el crecimiento del pelo y la salud del cuero cabelludo.
Cómo aplicar el aceite de oliva para el pelo
Eso varia dependiendo el objetivo. Si lo que queremos es tratar las puntas rotas y quemadas, lo mejor es aplicarlo, al igual que con el cabello seco, sólo en la spuntas. Si lo que queremos es tonificar o marcar el volumen o revitalizar el cabello seco y apagado, debemos hacerlo con un gotero y esparciéndose en todo el pelo, pero muy poco a poco para no exceder la cantidad de aceite.
Para beneficiarnos de las propiedades del aceite de oliva para el crecimiento, lo que debemos hacer es aplicarlo, y si es posible con un gotero mejor, sobre todo el cuero cabelludo, masajeando con la yema de los dedos.
4. Aceite de oliva en ayunas
En los últimos años se ha extendido la costumbre de consumir una cucharada de aceite de oliva en ayunas para mejorar la salud. Esto ayuda al aparato digestivo, beneficia la salud hepática, del hígado y de la vesícula biliar.
Al mismo tiempo ayuda en el tracto intestinal, siendo en ocasiones un remedio infalible contra el estreñimiento y este tipo de problemas intestinales.
Contraindicaciones
Aunque es enormemente beneficioso, debemos ser moderados con su consumo y no tomar más de una cucharada de este aceite crudo por las mañanas para evitar otro tipo de complicaciones. No debemos olvidar que pese a ser un aceite sano, es grasa y no debemos abusar las cantidades.
5. Aceite de oliva en nuestra mesa
Aunque es una obviedad, utilizar el aceite de oliva virgen o virgen extra en nuestras comidas es altamente recomendable. A diferencia de otros aceites, como el aceite comestible mezcla, el aceite refinado de maíz, el aceite de girasol, el de soja o cualquier otro, el de oliva aporta enormes beneficios. Y además es muy versátil, ya que lo podemos usar para saltear, condimentar ensaladas, hacer masas y pasteles y todo lo que se nos pueda imaginar.
Vaya, no conocía esto de tomar aceite en ayunas.
Lo tendré que probar.
Saludos.