Recuperarse de un parto no siempre es tarea sencilla. Por ello aquí elaboramos una lista de sugerencias a tener en cuenta. Tengamos bien presente que se considera como posparto las primeras 6 semanas tras el nacimiento, aunque en ocasiones este plazo se puede alargar unas semanas más.
Equilibrio hormonal
A muchas mujeres les surge la duda de cómo mantener las hormonas equilibradas, ya que la alteración hormonal provoca muchos problemas que van desde la irritabilidad al aumento de peso.
Una de las formas al alcance de todo el mundo es practicar alguna actividad física pasadas las primeras 6 semanas, porque durante este primer mes y medio tras el parto solo se aconseja caminar.
Una vez pasada la llamada cuarentena, la actividad no tiene por qué ser salir a correr, algo complicado cuando tenemos un bebé, teniendo en cuenta además que nuestro cuerpo aún está en pocas condiciones de tremenda hazaña. Lo que sí es posible practicar yoga o ejercicios sencillos en casa. Esto, además de ayudarnos a controlar los niveles hormonales, y además será positivo para el mantenimiento de los niveles de insulina y para evitar el estrés.
Alimentación
También es importante cuidar la dieta y evitar los alimentos procesados tanto para cuidar los niveles hormonales como para evitar aumento de peso. Es importante consumir frutas y vegetales frescos, cereales integrales, legumbres, semillas y granos.
Útero
Ya sea que el parto haya sido por vía vaginal o por cesárea, es muy común que se experimenten dolores uterinos posteriores, es decir, unas mini contracciones cuando el útero se encoge de nuevo buscando volver al tamaño previo.
Hay una tintura de hierbas con las plantas Viburnum opulus, Viburnum prunifolium, Achillea millefolium y Leonurus cardiaca que ayuda muy bien a esta tarea.
También se pueden realizar masajes en la zona abdominal para estimular y calmar al útero, para que poco a poco vuelva a su tamaño, y los propios pezones, con la succión del bebé, participan en esta tarea de encogimiento uterino.
Pezones
Los pezones muchas veces duelen, ya que se agrietan, y este dolor puede tornarse en ocasiones muy molesto. La infusión de rooibos puede aplicarse directamente sobre los pezones y evitar que éstos se agrieten. La crema de caléndula también es una muy buena opción, ya que es regenerativa.
Evitar y tratar la mastitis
La mastitis es una obstrucción del conducto mamario que en ocasiones puede llegar a provocar una inflamación muy dolorosa e incluso infección. Aunque también se da en mujeres no lactantes y hasta en ocasiones en hombres, lo más común es en mamás que dan pecho.
Para evitar esta infección es importante que el bebé vacíe los pechos y que la toma se alterne entre uno y otro para evitar el riesgo de contraer esta dolencia.
Un remedio natural muy efectivo para la mastitis es con hojas frías de col o repollo, previamente lavadas, que se pueden aplicar cortadas o enteras directamente sobre las mamas.
Cuidado del perineo
Una manera de cuidar el perineo, que suele resultar muy dañado o irritado después del parto, es con compresas frías. Se deben aplicar con regularidad, sobre todo durante la primera semana de posparto.
Dormir mucho
Es importante que la mamá, tras el parto, duerma muchas horas, tantas como sea posible para volver a recuperarse lo antes. Para ello es importante que las tareas del hogar puedan ser asumidas y repartidas por otras personas del entorno familiar.
Estos son solo algunos consejos. Hay muchas más cosas que se pueden realizar para volver a estar bien lo antes posible. Nuestras lectoras muchas veces son las que más enriquecen este tipo de artículos, con sus consejos y experiencia.
¿Qué otros consejos nos dejarías? ¡Nos encantaría leerlos, y seguro que a los demás lectores también, así que coméntanos tu experiencia!