No es necesario enumerar del ajo las propiedades que ya todos conocemos, tanto a nivel nutricional como medicinal y gastronómico.
Hoy vamos a hablar sencillamente del aceite de ajo medicinal y nutricional, del aceite del bulbo llamado científicamente Allium sativum y que aporta grandes beneficios para la salud.
Propiedades del aceite de ajo
El aceite de ajo concentra muchas de las propiedades del ajo, y por eso es tan importante. Los dientes de ajo crudos pueden resultar fuertes para consumir, pero el aceite, donde se consigue concentrar muchas de sus propiedades, lo vuelven más ameno y digerible.
Entre las propiedades nutricionales cabe destacar que es una enorme fuente de vitaminas, sobre todo de vitamina B6 y vitamina C.
En cuanto a la vitamina B6 o piridoxina, el ajo crudo contiene unas cantidades enormes, con un 95% de la cantidad diaria recomendada para una persona adulta por cada 100 gramos. Pero sinceramente, nadie comerá 100 gramos de ajo crudo sin sufrir algún efecto adverso. Por eso es por lo que el aceite de ajo es tan importante.
La vitamina B6, presente en el ajo de una manera mucho mayor que en cualquier otro alimento, es al igual que los otros nutrientes clasificados dentro de las llamadas vitaminas B, muy importante para estabilizar el sistema nervioso central y para la absorción de los nutrientes que obtenemos de los demás alimentos.
Además, entre las particularidades de esta vitamina están que participa en la formación del ácido clorhídrico y la hemoglobina, y es muy beneficiosa para fortalecer el sistema inmune.
Ya que hablamos del sistema inmune, otra de las vitaminas que se encuentra en abundancia en el ajo es la vitamina C (52% de la cantidad diaria recomendada por cada 100 gramos), la cual sirve para reforzar el sistema inmunitario, así como para la síntesis hormonal, la formación de los tejidos y el combate de los llamados radicales libres.
En menor medida, aunque también en buenas cantidades, se encuentran la vitamina B3 o niacina y la vitamina B5 o ácido pantoténico.
En cuanto a los minerales que podemos encontrar en las propiedades del aceite de ajo y en el ajo en general, cabe recalcar que este bulbo es una gran fuente de calcio, hierro, fósforo y zinc, y en menor medida de magnesio y sodio.
Beneficios del aceite de ajo
Además de los beneficios nutricionales del aceite de ajo, gracias a sus vitaminas y minerales, cabe resaltar que el mismo contiene propiedades antibacterianas, regenerativas, antivirales, antiparasitarias y antimicrobianas.
Gracias a sus propiedades medicinales, el aceite de ajo es muy bueno para combatir afecciones cutáneas como el acné, los granos, los forúnculos y los poros infectados.
También es muy útil para eliminar los parásitos intestinales. Gracias a sus principios antiparasitarios, el ajo contribuye a expulsar las lombrices del intestino y limpiar el organismo de este tipo de agentes.
Y por si fuera poco, es un complemento muy potente para eliminar el colesterol “malo” o LDL del organismo, además de beneficiar el sistema circulatorio.
Aceite de ajo para el pelo
El aceite de ajo puede beneficiar enormemente la salud del cabello. Ayuda a mejorar la salud del cuero cabelludo, combate la caspa, los hongos y posibles microbios, además de curar y desinfectar las heridas.
Al contener buenas cantidades de vitamina C, ayuda a regenerar el tejido capilar y a reforzar la salud del pelo.
Cómo se encuentra el aceite de ajo
El aceite de ajo se puede conseguir comercialmente en perlas. Su uso es estrictamente medicinal, dada su concentración. Pero también podemos hacerlo nosotros mismos.
Aceite de ajo en perlas o cápsulas
Las perlas de aceite de ajo se suelen encontrar en tiendas de medicina natural, herbolarios o herboristerías, y son cápsulas de glicerina vegetal rellenas con el aceite macerado en una proporción 1:1. Este aceite es puramente medicinal y su dosis recomendada es de 2 perlas, 3 veces al día, o lo que es lo mismo 6 perlas diarias espaciadas en tres tomas a lo largo del día.
Cómo hacer aceite de ajo
Pero también podemos hacer nuestro propio aceite medicinal de ajo. Para ello vamos a necesitar:
- 2 cabezas medianas de ajo
- Un litro de aceite de oliva virgen extra
- Un frasco grande (al menos un litro) de cristal con tapa hermética
Veamos como hacer el aceite de ajo, explicado paso a paso:
- Pelamos las cabezas y cada uno de los dientes de ajo, los cuales cortamos al medio, y los colocamos en un frasco de cristal grande (de más de un litro) de capacidad, añadimos el litro de aceite de oliva.
- Lo dejamos en un lugar seco y fresco, pero no en la nevera, sino una despensa o alacena.
- Lo dejamos macerar durante un mes o 30 días.
- Cada dos días deberíamos mover el frasco, y abrir ligeramente.
Pasados los 30 días, ya tenemos nuestro aceite de ajo medicinal listo para emplear en afecciones cutáneas, para el pelo o para cualquier otro uso que estimemos necesario. ¡Si quieres que además sean 100% ecológicos, te recomendamos que empieces a plantar ajos en tu jardín o patio!
Contraindicaciones del aceite de ajo
Los fabricantes de aceite de ajo en perlas o cápsulas de glicerina, no recomiendan que se excedan las 6 cápsulas diarias. Su consumo no está recomendado para niños pequeños, al menos en formato de perlas.
Una vez pasado el tiempo, le quitamos los ajos dentro? O los dejamos ?
Despues de los treinta dias ya que esta listo el aceite de ajo cuatas cucharada de aciete al dia se toman?
Consulta… ¿tiene uso culinario también?
Me encanta el ajo y lo consumo muchísimo y ese aceite de oliva con ajo macerado debe ser delicioso.
En algunos supermercados venden el aceite de ajo puro, tiene un sabor espectacular