Como ya saben los lectores de Ecocosas, nos apasiona todo lo que tenga que ver con la sostenibilidad. Pero para llevar una vida más acorde con esto, más respetuosa con el medio ambiente, debemos poner en práctica aquello que pensamos y en ocasiones profesamos. No se trata de teoría sino algo concreto, de algo tangible.
Una casa más sostenible
Qué mejor manera de empezar por el lugar ideal para ello: nuestra propia casa. Muchos cambios requieren una inversión, y en ocasiones no es poca esta inversión. Tanto si es una vivienda nueva como una reforma, deberemos empezar a hacer cuentas, pero a la larga son todo beneficios. Por un lado ahorraremos en energía, y ésta, al menos en España y Chile que son los dos contextos que conozco a la perfección, no para de subir.
Por otro lado, estaremos reduciendo nuestra huella de carbono y contaminación. Que no es poca cosa teniendo en cuenta los cambios drásticos que está teniendo el clima a causa de ello.
Además, yo prefiero pensarlo así: todo lo que invierta ahora me servirá para ahorrar en gastos mensuales, contaminar menos y vivir más cómodo. Y si en un momento dado quiero vender mi casa rápidamente, ya sea porque me quiero mudar de ciudad o por cualquier otro motivo, todos estos cambios hacia una vivienda más sostenible, serán valor añadido al inmueble.
Ahora sí, veamos 5 ideas para un hogar más sostenible ecológico y respetuoso con el medio ambiente y el entorno.
Aislamiento
El aislamiento es crucial. Aislar correctamente techos, paredes y suelos es mucho más importante de lo que se cree. Será la manera de evitar que el frío entre, así como de mantener el calor. Y lo mismo en verano con el calor. Antes de pensar en los sistemas de calefacción, refrigeración y demás, hay que valorar cuánto del aislamiento actual se puede cambiar y mejorar.
Ventanas
Agregar ventanas modernas, en el caso de las casas viejas, con cerramientos potentes y doble o triple cristal es otro paso después de aislar correctamente. La cantidad de energía en calefacción que se puede ahorrar con esto no es poca.
Bombillas de bajo consumo
Las bombillas de bajo consumo o las bombillas LED son las mejores alternativas a las bombillas incandescentes o tubos fluorescentes. Además, en la actualidad hay diferentes tipos de luz (de más a menos cálidas), por lo cual no debe suponer una diferencia en la iluminación si se eligen correctamente. Al menor consumo energético hay que sumar que la durabilidad es mucho mayor.
Electrodomésticos
Los electrodomésticos también pueden suponer una inversión pero que se refleja sin duda en la factura, ya que los que tienen la etiqueta A+++ consumen hasta un 25% del mismo tipo de electrodoméstico de la categoría D.
Calefacción
La calefacción es muy importante. Hay sistemas como los pellets, que si bien emiten CO2, la cantidad puede llegar a ser hasta 20 veces menor que en el caso de la calefacción a leña. Las estufas de bajo consumo, en especial los emisores térmicos eléctricos cerámicos, parecen hasta ahora la opción con mejor relación de gasto y resultado en el caso de la energía eléctrica.
Otros sistemas como las estufas de doble combustión, las chimeneas con un casete insertable, la aerotermia (esta solo tiene sentido en una casa muy grande), la geotermia y el suelo radiante parecen las opciones más interesantes.
¿Qué más?
En el caso de una vivienda nueva es importante siempre orientar la dirección para aprovechar la luz solar. Eso dependerá en qué parte del mundo te encuentres, pero siempre orientar la vivienda hacia el sol.
Las paredes deben revestirse y pintarse con materiales no tóxicos, naturales y biodegradables. Y siempre que la construcción lo permita, instalar placas solares para ser más autosuficiente y limpios.
Seguramente hay muchas cosas más que se pueden hacer. La lista se podría ampliar hasta el infinito, así que puedes aportar tu grano de arena en los comentarios.