Hola lectores, si estáis pensando en cambiar de teléfono móvil, hoy os vamos a recomendar una alternativa que cada vez es más sólida e interesante dentro del mercado de la tecnología: la compra de segunda mano. No solo se trata de una opción mucho más sostenible, sino que, además, nos permite acceder a dispositivos de alta gama a un precio mucho más reducido.
La fiebre por hacerse con el último modelo favorece una alta rotación de compra y es una gran oportunidad para todos aquellos que buscan un móvil de calidad, con las mejores prestaciones, pero no se obsesionan por tener la novedad más actual. Hoy en día salen versiones cada año, algunas únicamente con pequeños cambios, y esto hace que dispositivos interesantes y casi nuevos vuelvan al mercado.
Comprando segunda mano no solo consigues un teléfono móvil de las mejores marcas, como Apple o Samsung, por un precio mucho más bajo, sino que, además, puedes acceder a descuentos extra si estás al tanto de los códigos que ofrecen muchas tiendas especializadas, como por ejemplo un cupón Cash Converters.
Sin embargo, pese a que es una alternativa que cada día cobra más importancia y tiene más control, es importante seguir una serie de recomendaciones para que tu compra de segunda mano sea acertada y fiable.
Estado general del smartphone
Primero haremos una inspección visual buscando arañazos, golpes, roturas en la pantalla o en parte posterior. También nos fijaremos en limpieza de los conectores. Solo si todo se ve bien en esta primera inspección seguiremos con el resto.
También es importante que nos informemos sobre el modelo particular y si existen fallos de fábrica o cuáles serían los problemas más habituales del mismo para poder contrastar que el que vamos a comprar no los tenga.
Batería, duración y carga
Continuaremos por verificar la batería y saber si es extraíble o no, ya que de no serlo y tener que cambiarla, tendríamos un gasto extra más elevado. En este caso también tendríamos que conocer si es resistente al agua, pues si tenemos que abrirlo para el cambio hay que asegurarse de que quede de nuevo bien sellado.
Hoy ya son más comunes los equipos con batería que no se puede cambiar sin ir a un taller, por lo que debemos ver la duración de la misma, cuando tarda en cargar, si el cargador es el original y que no tenga problema de contacto en el USB.
Una batería de un buen equipo debería durar entre 2000 a 3000 ciclos de carga; si la batería se carga una vez al día en un año deberíamos agotar unos 400 ciclos. Los propios dispositivos suelen tener la información sobre la salud de la batería y existen Apps externas en las que también podemos consultar este dato.
Pantalla, fluidez y brillo
Otro apartado importante es la pantalla, ver qué tecnología usa el dispositivo, si es actual, que se vea bien, que tenga un buen nivel de brillo y ver cómo se comparta bajo la luz del sol.
También comprobar cómo va la fluidez del móvil, qué pasa cuando llevamos varias apps abiertas, cómo funcionan las funciones de redes, compartir internet, verificar el bluetooth, la salida para los cascos y demás componentes externos que podemos emplear. Verificar también la calidad del audio, tanto de los altavoces como del micrófono.
Garantía y lugar de compra
Por último, es interesante ver si el lugar donde lo compramos nos ofrece alguna garantía o si podemos reclamar al menos en los primeros días en caso de encontrar algún fallo durante su utilización. En este sentido, nuestra recomendación es acudir siempre a tiendas especializadas, como Cash Converters, que no solo analiza al detalle los dispositivos antes de ponerlos a la venta, sino que ofrece 2 años de garantía. Por otro lado, es interesante saber si existe la posibilidad de que compren nuestro móvil anterior o si tienen alguna opción para el reciclaje de móviles en desuso. Ahora ya sabes cómo conseguir un smartphone a buen precio y de buena calidad que nos garantice unos años de buen uso, al mismo tiempo que ahorramos dinero y de forma más sostenible que comprar el último modelo del mercado.