Bioplástico a partir de restos de aguacates

En México una empresa desarrollo un proceso para poder elaborar bioplásticos a partir de los residuos de aguacates.

Con todas las prohibiciones que están empezando por suerte ha imponerse sobre los plásticos de un solo uso alrededor del globo, existe una creciente demanda de alternativas biodegradables.

El problema es que algunos plásticos biodegradables todavía se fabrican a partir de combustibles fósiles, y el 80 por ciento de los «bioplásticos» biodegradables se fabrican a partir de fuentes alimenticias, como el maíz.

Cómo si esto fuese poca cosa además los plásticos biodegradables suelen costar alrededor de un 40 por ciento más que un plástico normal.

Pero por suerte un ingeniero bioquímico mexicano llamado Scott Munguia ha encontrado una solución creativa y hay muchos otros trabajando en soluciones similares en distintas partes del planeta.

Plástico con semillas de aguacate

Su empresa Biofase está ubicada en el corazón de la industria del aguacate en México, donde convierte 15 toneladas de huesos de aguacate por día en pajitas y cubiertos biodegradables.

Estos son deshechos descartados por las compañías locales que procesan la fruta, y que antes hubiesen terminado en un vertedero. Así que no sólo sus costos de producción son muy baratos, sino que está ayudando a reducir los residuos agrícolas.

La compañía puede entonces traspasar este ahorro al consumidor, manteniendo unos precios iguales a los del plástico convencional.

El bioplástico de semilla de aguacate no corta nuestro suministro de alimentos ni requiere de tierras adicionales para ser dedicadas a su producción.

Y lo mejor de todo es que es verdaderamente biodegradable, a diferencia de muchos plásticos «biodegradables». Se descompone completamente en sólo 240 días, en comparación con el plástico convencional, que se estima que tarda 500 años en descomponerse y nunca se biodegrada por completo.

Si se mantiene en un lugar fresco y seco, puede durar hasta un año antes de que comience a degradarse.

Munguia descubrió cómo extraer un compuesto molecular de esta semilla para obtener un biopolímero que pudiera ser moldeado en cualquier forma.

«Nuestra familia de resinas biodegradables puede ser procesada por todos los métodos convencionales existentes para el plástico», dijo un representate de la empresa.

En fin buenas noticias para todos y espero que de a poco más alternativas como esta dejen de ser alternativas y se convierta en lo convencional.